domingo, 27 de septiembre de 2009

Francis Allison: la historia de un chivo expiatorio

La expresión "Chivo Expiatorio" proviene de un ritual del antiguo pueblo de Israel para el cual se elegían dos jóvenes machos cabríos. Mediante el azar uno era el elegido para ser sacrificado por el sacerdote en simbolo de adoración a Yaveh (Dios); el otro era cargado con todas las culpas del pueblo judío, y entregado a Azazel (el demonio). Este último, conocido como "chivo expiatorio", era abandonado en medio del desierto acompañado de insultos y pedradas durante su trayecto final. Hoy día, utilizamos esta expresión para denominar a aquél que ha pagado las culpas de la gran mayoría, librando a estos de represalias, o al que se le atribuye este papel por razones ulteriores en el discurso político o social.

La reciente renuncia del último Ministro de Vivienda y Construcción, Francis Allison Oyague, corrobora cómo es que la cultura del cargamontón tiene efectos demoledores en la figura de un personaje público que pudo tener un mejor futuro político en este país. Presionado por las críticas surgidas tras la revelación de que brindó asesoría legal a la empresa Business Track - BTR, renunció al cargo, a casi cuatro meses de haber asumido dicho portafolio. Estoy convencido de que hay demasiada basura por limpiar para conocer lo que esta realmente escondido en el fondo de este caso.

Lo que a continuación se presentará es una visión acerca del gran ingenio e inteligencia con la cual el partido aprista peruano y los otros partidos políticos de oposición jugaron a no quemarse entre ellos sino mas bien incendiar como un muñeco de año nuevo a un "independiente" quien tenía un "aceptable background" en su gestión como alcalde del "movido" distrito de Magdalena. Por ello, considero que su asunción al cargo de ministro no fue una casualidad, sino algo premeditado con el más frío cálculo político que se pueda haber visto antes. Recordemos la famosa frase de Mufarech: "Otorongo no come otorongo" (En buen cristiano: un congresista no puede ir contra otro congresista porque se conocen bien por ser de la misma "calaña").

En primer lugar, Business Track - BTR era una empresa dedicada a la interceptación telefónica y recolección de información para ser vendida a quien los contratara o al mejor postor en el mercado. Esta actividad, a todas luces ilícita vulneraba los derechos fundamentales a la intimidad y a las comunicaciones de las personas. Francis Allison trabajó para BTR a traves de asesorias legales como las que presta cualquier abogado independiente a una empresa o un particular.

En segundo lugar, La empresa Business Track Sociedad Anónima Cerrada (BTR S.A.C.), fue acusada de estar tras la grabación de los llamados "petroaudios" entre el ex-ministro de pesquería del primer gobierno de Alan García, Rómulo León Alegría y Alberto Quimper a.k.a. "Don Bieto". Los famosos "petroaudios" revelaban cómo se llevaban a cabo las licitaciones del estado en favor de empresas extranjeras (Discover Petrol) a traves de coimas y tratos "bajo la mesa". Fue tal la popularidad e impacto del código linguístico del mundo de la corrupción peruana que, luego de ser escuchadas en cadena nacional, expresiones como "Faenón" (un trabajito con enormes ganancias) y "Aceitada" (sinónimo de sobonear, franelear, florear o mejor dicho ungir a alguien importante dentro del engranaje para que el sistema siga corriendo como si nada) se hicieron famosas al día siguiente. Las conversaciones entre estos dos sujetos dieron a entender a la ciudadanía que la corrupción era un negocio más en el país con la particularidad de que sólo ganaban pocos en este negocio (sólo un círculo cerrado en las altas esferas políticas y económicas del país). El escándalo llegó a tocar al primer ministro Jorge del Castillo quien se vió forzado a renunciar al cargo para que el escándalo no llegara incluso a manchar a la figura presidencial.

Tercero, las difamaciones y calumnias (todas en cargamontón) hacia la figura de Francis Allison por parte de la prensa y la "clase" política del país fueron fulminantes y terminaron por tambalear y hacer caer a este benjamín político que venía desempeñando un buen papel como ministro de vivienda y construcción. Allison había asegurado que el Fondo de Reconstrucción del Sur (Forsur) llegaría a construir 15 mil viviendas hasta el 15 de agosto del 2010, con o sin el apoyo de las autoridades de la región Ica (la zona más devastada por el terremoto de agosto del año 2007). Recordemos que en el Perú, si tu le das a la población necesitada ("los pobres") cuatro paredes y un techo, ellos te identificarán como aquél "benefactor" que merece ser elegido presidente en retribución por esas obras. (El pueblo "alimentado" diariamente con temas como Alicia Delgado, Magaly, El Men, La Razón, el gaycidio de Marco Antonio, La iglesia Pare de Sufrir, Eva Bracamonte y Liliana Castro; dificilmente podrá separar la figura del "benefactor" con los fondos con los cuales ese benefactor pudo realizar dichas obras. Algo así como lo que hacía Fujimori en las zonas más deprimidas del país). En suma, un buen desempeño de sus tareas como ministro y el cumplimiento de su promesa implicaban votos y simpatías para Allison como el único posible "Outsider" político elegible entre fiascos como Keiko Fujimori, Ollanta Humala o algún aceitado oficialista del Partido Aprista.

En cuarto lugar, la renuncia de Allison ha sido un mensaje sólo para aquellos que pueden descodificarlo: "No te metas con nosotros, si lo haces te cagamos sin importar quien seas". Es decir, con el tremendo escándalo de los "petroaudios" la atención de la opinión pública se centró en este caso y el seguimiento de la prensa no podía contra esta exigencia del público. Era como si la demanda por conocer qué sucedía en las altas esferas del poder derrotaba a los designios o mandatos de la radio y la televisión. No pudo pasarles algo "mejor" (aunque es muy triste) como el asesinato de la cantante folcklórica Alicia Delgado, la historia de un crimen pasional entre dos lesbianas y una serie de implicados envueltos en borracheras, encamadas y asesinatos a sueldo. Esto distrajo por un instante la atención del público, sin embargo, aún no se llegó al punto del olvido. Luego de ello, vendría el revivido escándalo mediatico del asesinato de la millonaria judía Miryam Fefer por parte de su presunta asesina e hija Eva Bracamonte Fefer y su pareja Liliana Castro Manarelli (ex seleccionada de fútbol femenino y sobrina de Luis Manarelli Rachitof implicado en el asesinato del tristemente célebre "Calígula"). El morbo crecía en torno a este caso y el caso de los petroaudios se esfumaba en la niebla.

Y es aquí donde comenzaba la función: Francis Allison (ex alcalde del distrito de Magdalena y figura política con una imagen de pituco con apellido extranjero tenía todas las de obtener réditos políticos y simpatías desde su nuevo cargo en el poder ejecutivo) fue elegido Ministro de Vivienda y Construcción, chambeaba normal y prometió hacer lo que el gobierno no había hecho en tres años (tres años!!!!!!). Con un frío cálculo habían escogido al "Chivo Expiatorio" con el cual matarían no dos, sino tres pájaros con un solo tiro: Distraer aún más la atención de la opinión pública, poner en jaque a la prensa que obtenía información de esta "fuente" secreta y sobretodo voltear la tortilla del caso Bussiness Track - BTR ya no contra Rómulo León, Quimper o los aceitados del Apra; sino en perjuicio de un flamante y novato abogado Francis Allison Oyague.

Brother, yo que tú, la pensaba mil veces antes de aceptar el cargo de ministro, me desligaba completamente de Business Track -BTR y me defendía con la tésis del secreto profesional. Te han embarrado, no te han dejado chambear y para remate fuiste el chivo expiatorio perfecto para este intrincado caso de corrupción.

Ahora ¿Qué más vendrá?

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